martes, 11 de agosto de 2015

Falta media hora para salir del trabajo y...

Me estoy durmiendo a la V. Son feos los días en que no hay mucho que hacer, amo los días en que hay tantas cosas que hacer, que hasta te agobias un poquito, pero la verdad es que me la paso mejor.

Esté día hice algunas cosas del trabajo y lo demás lo dediqué a platicar con los dos que me gustan, a leer artículos del chapo y otras cosas. Me da mucha tristeza la situación en México, a veces no creo que estén pasando las cosas que pasan, yo sigo en mi mundo color de rosa, quejándome de los inseparables kilos de más que tengo, de que me dejaron las uñas diferentes a como yo las quería pintadas y ese tipo de bobadas.

Ya quiero que sea fin de semana, una gran amiga, Alba, viene de España, ella sigue viviendo allá, se que al verla me revivirá muchas cosas, una de ellas, las ganas de volver a ir a ese bello país que tanto cariño le tengo. Creo que desde que regresé quiero volver, pero a la ves no, en muchas cosas me invadirá la nostalgia y no se si podría con ella, que si voy a poder, pero pinchi nostalgia, es como que el sentimiento mas horrible, te ahoga  y así.

Ay, qué bonito que esté escribiendo en mi blog, en mi diario que luego fue semanal, luego mensual, y ahora parece ser anual. Iba a poner que no ha habido muchos cambios en mi vida, pero la verdad es que sí, me siento muy diferente, aunque sigo conservando mi esencia que en realidad no sabría definirla bien. A veces me siento muy mujer, en todo el sentido de la palabra, además de inteligente y hermosa como nunca antes me había sentido, me gustan los 30 y tantos, pero también, a veces, me siento una niña que sigue sin comprender tantas cosas del proceso llamado vida. Ah! la vida está tan sobrevalorada, termino diciendo en muchas ocasiones.

Sigo sin tener perro, pero tengo dos gatas. Sigo sin tener novio, pero tengo un amigo con el que me beso de vez en cuando :)